Al iniciar el año son muchas las metas, planes y proyectos que nos hacemos. Sin darnos cuenta ponemos en automático las exigencias y con ellas aparece el estrés, para entorpecer nuestros avances y productividad.
Estas sencillas herramientas nos pueden servir para mantenernos conscientes y armonizados:
- Priorizar: Atiende lo que consideres más importante y urgente. Asegúrate de no acumular pendientes.
- Organizar y limpiar tus espacios: Así podrás identificar lo realmente necesario. La acumulación genera desorden y como es afuera, es adentro.
- Respirar: Incorporar la respiración consciente que nos mantenga centrados en el aquí y ahora, que relaje las tensiones y controle la producción de cortisol.
- Definir un tiempo para cada cosa que consideremos importante: De esas que nos inyectan armonía y vida. Piensa en las actividades que amas hacer y ábrele un espacio en la agenda.
- Comparte con aquellas personas que te generen y aporten alegrías, energía, ánimo, risas, buenos momentos, buenos recuerdos, etc.
- Usa la empatía y evita las críticas: No sabemos por lo que ese otro está pasando. En su lugar brindemos ayuda, eso sumará para convertirnos en mejores personas.
- Agradece tu existencia, los días y todo lo que suceda. El agradecimiento tiene un poder inmenso. Practica a diario todas aquellas actividades que te generen paz como rezar, meditar, escuchar música, leer, ejercitarte, etc.
- Solicita ayuda especializada en los momentos requerido. El lema debe ser “Menos preocupación y más acción”.
Construyamos días maravillosos y plenos. Desde la FCVB deseamos para ustedes y sus familiares un 2023 esplendido, en paz, con salud, amor, gozo, abundancia y prosperidad, de la mano de Dios siempre.